En la "cultura" occidental hemos pasado del respeto, la obediencia a nuestros padres, abuelos ó “los que mandan” en la familia a desapartarnos de sus consejos y “mandatos”. Buscamos la libertad en toma de decisiones y crear nuestra propia historia. Las culturas orientales como China y Japón la mantienen, es pilar importante lo que sus ancianos y “líderes” familiares promuevan. “No hay padre que desee el mal a sus hijos, pueden equivocarse en sus decisiones, pero hacerlo con la intención de un daño es tesis equivocada”. Japón pasó de ser un país golpeado por las atrocidades de la humanidad en sus versiones de las guerras mundiales a una potencia mundial y China le sigue los pasos. La verdad los asiste.
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