“No fumaban, no tomaban (ni café), no visitaban bares…” se podría definir (manera urbana) en vida a los hermanos Le Baron, todos estamos expuestos al peligro, pero ellos por costumbres propias no lo estaban. Sin embargo, la delincuencia no conoce límites, ni mucho menos el respeto para aquellos que respetan lo bueno y malo de nuestra sociedad. El primero de ellos secuestrado por la razón más estúpida que se les pueda ocurrir. En días pasados, el hermano mayor después de levantar una movilización ciudadana para pedir por la liberación de su hermano, fue secuestrado y asesinado. “Para que vean que los Le Baron no son intocables”. Fue el último mensaje de los asesinos. Qué su dios los perdone.
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